Existen varios tipos de piojos, el piojo de la cabeza (pediculus humanus capitis) del cuerpo y ropa (pediculus humanus corporis) y el del pubis (pediculus phthirus pubis) de todos estos, el que realmente es un problema para nosotros es el de la cabeza, ya que se ha extendido por todo el mundo, entre 6 y 12 millones de personas a nivel mundial se infestan con este piojo.
El grupo más vulnerable, son los niños entre 3 y 11 años, siendo más propensas las niñas por lo largo de su cabello.
Es un parásito que se transmite por contacto directo, cabeza con cabeza, al jugar o abrazarse y también por contacto indirecto al intercambiarse diademas, cachuchas, o con el uso de cepillos y peines para el cabello.
TRANSMISIÓN
La transmisión no distingue estrato social, edad o sexo. Basta con que uno los tenga y junte la cabeza con otro para infectarse independientemente de la higiene. Sin embargo, su presencia suele ser más frecuente en zonas de pobreza y en situaciones de hacinamiento de personas, donde la higiene personal es precaria.
Una vez que se pasan, se mueven fácilmente entre el cabello, prefieren asentarse en la base de la nuca por ser una zona más caliente y húmeda.
CICLO DE VIDA
Debemos recordar que es un parásito que se alimenta de sangre para poder vivir y reproducirse prolíficamente; su ciclo de vida es de 30 días fuera del cuerpo, un piojo no vive más de dos días.
El peligro de su propagación es su poder de poner huevos, pueden ovopositar en su corta vida hasta cien huevos.
CONTROLADO
Lo complicado de su control depende de nosotros mismos, si lo identificamos, lo notificamos en nuestro grupo de amigos, en casa, escuela y trabajo, disminuye su propagación.
Existe un gran número de shampoos comerciales con insecticidas para uso humano que se vende al público general sin receta médica, recomendando seguir las instrucciones del uso en etiqueta.
TRATAMIENTOS
Existen tratamientos tradicionales y naturales como el de utilizar medio litro de vinagre con un litro de agua y aplicarlo por una hora en el cuero cabelludo y luego lavarse la cabeza teniendo cuidado de que no entre en contacto con los ojos, utilizando posteriormente un peine de dientes cerrados para poder despegar de la base del cabello a la liendre, que es el huevo del piojo.
ASISTENCIA MÉDICA
Si existe una gran comezón y lesiones en la piel, no se automedique, busque la asistencia médica. Con este breve conocimiento general, el regreso a clases será más seguro.